Qué es la depresión y cómo combatirla

¿Sabías que en España hay 2.000.000 millones de personas con depresión?

¿Eres una de las personas que, en algún momento, ha usado la expresión “Tengo depresión” o “Estoy deprimido”? . Normalmente hacemos uso de estas expresiones para referirnos a nuestro estado de ánimo cuando no estamos pasando por un buen momento o nos sentimos tristones. Pero…

¿Qué es realmente la depresión?

La depresión es un trastorno mental frecuente. No podemos definir la depresión simplemente como un estado de ánimo, sino también como una enfermedad que forma parte de las alteraciones en estados afectivos y se manifiesta de diferentes formas e intensidades. Según la Organización Mundial de la Salud, la depresión afecta a más de 300 millones de personas en el mundo.

La depresión afecta más al sexo femenino que al masculino.

¿Cómo podemos detectar la depresión?

Los síntomas de la depresión son muy variados pero sí tiene algo en común: generalmente se presentan con una gran tristeza. Otros síntomas relevantes de la depresión son:

  • Estado de ánimo deprimido: Nos sentimos apáticos, con desgana y perdemos interés por actividades que antes nos resultaban placenteras. Se reduce la capacidad de disfrute. Esto último, en términos psicológicos, se conoce como anhedonia.
  • Falta de atención: Incapacidad para concentrarse en una tarea determinada.
  • Alteración del sueño: O desarrollamos el insomnio o, por el contrario, somnolencia durante todo el día.
  • Pérdida de peso.
  • Disminución de la confianza en uno mismo y baja autoestima.
  • Ideas suicidas.
  • Culpa: Sentimientos de cargo de conciencia injustificados.

Dependiendo del número y de la intensidad de los síntomas que podamos padecer, los periodos depresivos pueden clasificarse como leves, moderados o graves.

Las personas que tienen depresión, en general, también padecen síntomas de ansiedad, baja autoestima y muchos obstáculos de concentración e incluso algunos que no tienen justificación médica.

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Factores de riesgo:

Es habitual no encontrar una causa concreta o, al contrario, que la enfermedad pueda ser consecuencia de muchos factores a la vez. A continuación, expongo algunos:

  • Enfermedades previas: Padecer enfermedades tales como la diabetes, tener cáncer, párkinson, migrañas, enfermedades cardiovasculares…pueden favorecer la llegada de la depresión.
  • Situaciones personales: En ocasiones, experimentamos en nuestro día a día situaciones que no dependen de nosotros. Podemos quedarnos en paro por un tiempo, puede que un ser querido fallezca, sufrir un estrés continuo por diferentes motivos e incluso el abuso de bebidas alcohólicas o drogas.
  • Factores familiares y genética: La presencia de problemas de salud, como hemos mencionado anteriormente, puede ser un factor predisponente de la aparición de depresión. Convivir con familiares que padezcan este trastorno también puede afectar.
  • Falta de relaciones sociales: Si tenemos buenas relaciones sociales y vínculos de apoyo por parte de nuestro entorno, percibimos una fuente de bienestar, nos sentimos más fuertes emocionalmente y prevenimos la depresión o no la notamos en su totalidad.

Hablemos de depresión encubierta:

La depresión encubierta la padecen muchas personas y desde Evolma queremos darle voz, seguramente hayan muchas que se sientan identificadas con la lectura.

¿Puede alguien sufrir depresión y no saberlo?

La depresión frecuentemente no la vemos, no la identificamos o, simplemente, no se diagnostica. Una persona que sufre depresión encubierta está permanentemente condicionada a luchar con sus “demonios internos” de una forma que no es visible. La depresión puede estar diagnosticada o no, y puede que las personas más allegadas a la persona que la sufre, como la familia, amigos o compañeros, sepan de su existencia o no, ya que no se suele exteriorizar o compartir con los demás.

¿Qué síntomas tenemos cuando la sufrimos?

Las personas que padecen depresión encubierta suelen estar más centradas en otras personas antes que en ellos mismos. Esto es: qué les pasa a los demás, cuáles son sus problemas, sus inquietudes. De esta manera, evitan ser el centro de atención, que les pregunten y puedan saber que les está ocurriendo. En muchas ocasiones, no son conscientes de lo que les sucede. Algunas de las características definitorias de este trastorno son:

  1. El positivismo y la disponibilidad hacia los demás son actitudes que les caracterizan. Si les preguntas por su estado de de ánimo, nunca tienen preocupaciones y siempre se sienten bien.
  2. Suelen centrarse al máximo en las diferentes actividades de su día a día: su trabajo, su familia, sus amigos. Es su forma de “evitar sentir” para no sufrir.
  3. Alteraciones en la alimentación. Pierden las rutinas alimenticias. Por otro lado, cada vez es más común la expresión “comer emocional” para explicar la necesidad de ingerir alimentos para llenar un vacío emocional. Si este tipo de conductas persisten, pueden desembocar en trastornos de la alimentación.
  4. Trastornos del sueño. No logran descansar o tener un sueño reparador. Conciliar el sueño también les resulta complicado.

5 hábitos de las personas que padecen depresión encubierta:

  • Cuando las personas hacen esfuerzos intencionados para aparentar un estado de felicidad o de estar bien.
  • La práctica de remedios habituales como el deporte, la música paseos…para lidiar con su estado de ánimo diario.
  • Desarrollan un ejercicio de inventar historias tapaderas para encubrir la realidad.
  • Invocan a un profundo pensamiento y reflexiones sobre la vida y la muerte.
  • Todo el mundo desea aspirar a un propósito u objetivo en la vida. Las personas que padecen depresión encubierta intentan alcanzar sus objetivos de forma interna, sin compartirlos, y esto puede provocar síntomas de ansiedad.

Tratamiento para la depresión en Evolma:

Es importante determinar la causa y actuar directamente sobre ella. Esto dependerá, en gran medida, del origen y de la gravedad de la depresión. La terapia para adultos es un tratamiento psicológico que se desarrolla en tres ejes:

  • Psicoterapia, para conseguir un cambio de actitud y comportamientos ajustados.
  • Terapia cognitivo-conductual, para ayudar a modificar determinadas conductas y pensamientos negativos, sustituyéndolos por otros más adaptativos.
  • Activación conductual, para transmitir técnicas psicológicas que tienen como objetivo que el paciente sea autónomo a la hora de dominar su vida y su entorno.

Datos de interés sobre la depresión:

  1. Entre el 10 y 15% de los pacientes que sufren depresión se suicidan.
  2. En España se suicidan entre 5 y 9 personas al año por 100.000 habitantes.
  3. El suicidio es la segunda causa de muerte en los jóvenes que comprenden las edades desde los 15 a los 25 años.
  4. El paro es una causa que aumenta el suicidio.

No te machaques a ti mismo pensando que “es una tontería”, “no necesito un psicólogo”, “estoy loco” se parará… Es fundamental tratar la depresión a tiempo y ponerse siempre en manos de profesionales cualificados para ello. Se trata de una enfermedad muy común hoy en día y resulta primordial detectarla, para poder iniciar un proceso terapéutico y así alcanzar un estado de bienestar mental y emocional.